Gagaka Rua Hostel
Servicios principales
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Wi-Fi gratis
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Servicios 24 horas
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Piscina
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Actividades
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Spa y relajación
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Comida/Bebida
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Agradable para niños
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Aire acondicionado
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Mascotas
Ubicación
Situado a 250 metros del Parque Bolívar, el hostal Gagaka Rua ofrece una piscina exterior para el disfrute de los huéspedes. El establecimiento dispone de un aparcamiento y está situado a una distancia de 3 km del Parque Tayrona.
Situado a unos 10 minutos en coche de hitos culturales tan significativos como el Museo Bolivariano de Arte Contemporáneo, la propiedad se encuentra también a 3 km del Cerro Ziruma. La Plaza Parque Simón Bolívar se halla a unos 20 minutos a pie. Las familias pueden pasar un buen rato visitando el Acuario y museo del mar del Rodadero, que está a 10 minutos en coche.
Algunas habitaciones del establecimiento disponen de un baño privado con una ducha, y algunas cuentan además con un aparador. La propiedad también cuenta con suelo de azulejos, un suelo de baldosas. Las camas de algunas habitaciones tienen ropa de cama y almohadas de plumón hipoalergénicas.
Todos los días se sirve un desayuno americano. El hostal goza de una buena ubicación enfrente del restaurante Eli's Restaurant, donde podrás degustar platos mediterráneos. El restaurante Restaurante Hostal El Españolete, especializado en cocina española, está a tan solo 300 metros. El establecimiento también ofrece una cocina compartida. El aeropuerto Santa Marta está a 20 km del hostal Gagaka Rua y la parada de autobús To Terminal, a unos 10 minutos a pie. Las instalaciones de tratamiento incluyen tratamientos de belleza, exfoliación corporal y tratamientos faciales.
Reseña de un crítico de hotel
Mi experiencia en Gagaka Rúa Hostel fue simplemente encantadora. Desde que llegué, el acogedor ambiente y la amabilidad de Diego y Sergio me hicieron sentir como en casa; siempre dispuestos a ayudar y hacer que mi estancia fuera inolvidable. Las habitaciones son amplias y limpias, y el aire acondicionado funcionó de maravilla, proporcionando un alivio perfecto del calor. Pero, sin duda, el verdadero lujo fue disfrutar de una de las dos maravillosas piscinas, ya sea en la azotea con vistas espectaculares o en la planta baja, donde la tranquilidad reinaba. En conjunto, la atención al detalle, la limpieza y la calidad del servicio ofrecen un excelente valor por el dinero, haciéndome desear regresar a Santa Marta para disfrutar de esta joya una vez más.
